Así es cómo afecta el calor a las várices y 3 tips para tratarlas en verano

Así es cómo afecta el calor a las várices y 3 tips para tratarlas en verano

Publicado en: 13 de febrero de 2023  y atualizado en: 14 de febrero de 2023
  • Para compartir
Escuche el texto Detener el audio

El verano es para la gran mayoría de las personas, una de las épocas más esperadas del año. Verano es sinónimo de descanso y vacaciones. Pero, también puede llegar a ser difícil para quienes no soportan demasiado bien el calor. Y en especial, puede ser muy incómodo y hasta doloroso, si tienes várices.

 

¿Cómo afecta el calor del verano a las várices?

Es habitual que los síntomas asociados con las varices empeoren durante el verano. Las várices, también llamadas venas varicosas, son un signo de insuficiencia venosa. Esta es causada por válvulas de venas dañadas, que provoca una tensión excesiva en las venas de las piernas, lo que hace que se agranden y se tuerzan. 

El exceso de sangre se acumula en las venas, lo que provoca la conocida hinchazón que vemos en muchos casos de várices. Esta hinchazón crea síntomas muy incómodos y a veces dolorosos. 1

  Aquí puedes conocer más sobre Tipos de várices y factores de riesgo

El calor del verano causa que estas venas ya hinchadas se ensanchen aún más y se llenen de sangre adicional, lo que empeora los síntomas. A su vez, esto hace que las venas se vuelvan más pronunciadas en la superficie de la piel, haciéndolas aún más visibles. 2

 

3 tips para tratar las várices en verano y aplacar los síntomas

  1. Mantenerse lo más fresco posible. Puedes ayudarte con ventiladores o un aire acondicionado controlado para mantener una temperatura cómoda y agradable. Inevitablemente, tendrás que salir al exterior, por lo que es aconsejable siempre usar protector solar para prevenir que los rayos del sol generen aún más daño en las várices y en la piel que las recubre. A su vez, darse duchas de agua fría sobre las piernas no solo aliviará el malestar sino que favorecerá la reducción de los vasos sanguíneos, mejorando la hinchazón y los calambres que suelen acompañarlo. 3 ​​
  2. La hidratación es clave. Beber bastante agua, evitando el exceso de bebidas con azúcar o alcohol es una forma sencilla de prevenir que los síntomas asociados a las várices empeoren con el calor del verano. También es recomendable consumir alimentos saludables que bajen la presión arterial y sean antiinflamatorios, como por ejemplo, verduras de hoja verde oscura (como la espinaca), tomates, aceite de oliva,  salmón y nueces. 4
  3. Promover la circulación. Es importante estimular la circulación de la sangre, por lo que practicar ejercicios leves y poner los pies en alto mientras se está sentado es más que aconsejable. En caso de que los síntomas se tornen dolorosos, usar medias de compresión también puede ayudar a minimizar las molestias. 5 

 

Tratamiento de las várices y prevención

Hoy en día existen diversos tratamientos para las várices que te permitirán disfrutar de nuevo del verano. Cada día se hacen más habituales y efectivos las opciones de tratamiento no quirúrgico, como los que usan radiofrecuencia,  láser transdérmico y terapia fotodinámica. ​​6

A su vez, el tratamiento farmacológico a través de medicamentos flebotónicos suele ser muy recomendado por los médicos tratantes por su eficacia en la reducción de los síntomas de insuficiencia venosa.

Para prevenir síntomas como la hinchazón y los calambres dolorosos que suelen darse por la noche, la principal recomendación es el uso de medias de compresión. El consejo médico es colocarlas por la mañana antes de comenzar a caminar, evitando darle tiempo a la sangre de acumularse en las venas.

Por último, usar ropa cómoda, evitando prendas muy apretadas y tacones altos, será esencial para mantener las molestias al mínimo. Este tipo de indumentaria ejerce demasiada presión generando hinchazón y constricción del flujo sanguíneo. Ropa suelta y zapatos cómodos son los mejores aliados, en especial durante el verano. 

Este material es sólo para fines informativos. No debe ser utilizado para realizar el autodiagnóstico o la automedicación. En caso de duda, siempre consulte a su médico.
  • Para compartir
¿Encontraste útil este contenido?